"Yo me veo más en forma que nunca, con poco que perder y mucho que ganar y disfrutar en las carreras"
Juan del CampoEl esquiador de Basque Team Juan del Campo se muestra pletórico tras haber firmado en la Copa del Mundo de Schladming el mejor resultado de su trayectoria
Juan del Campo aún conserva en la retina la imagen de las 45.000 personas que le jalearon en una de las cunas del esquí alpino, en la pista austriaca de Schladming. El bilbaino pasó por tercera vez en su carrera a la segunda manga de una Copa del Mundo y terminó además la prueba en el puesto 22, el mejor resultado de su carrera hasta la fecha, marcando además el décimo mejor tiempo en la segunda manga.
«La verdad es que estoy muy bien. Este año la preparación ha sido buenísima. El enfoque ha sido diferente. No tanto volumen de trabajo, no tanta intensidad, sino intentar trabajar de forma inteligente. Yo me encuentro muy bien físicamente. Tengo los dolores inherentes a un deporte como éste, las rodillas y la espalda porque el impacto es muy alto, pero me encuentro muy bien sobre todo mentalmente, muy tranquilo, muy liberado y la verdad es que se nota mucho en el nivel de esquí» asegura Del Campo.
La temporada ha comenzado con un rosario de pruebas tanto en diciembre como en enero. Las carreras se han dado una detrás de otra, sin tiempo para respirar, y sin demasiada fortuna, hasta llegar a la cita de Schladming. El resultado ha sido toda una confirmación para el propio Juan, para seguir con el trabajo que llevaba haciendo.
«Ha llegado en el mejor momento. Es la prueba, es la carrera y muy contento de que haya salido justo ahí. No tienes mucho tiempo para pensar, para cambiar cosas, tiens el tiempo justo para entrenar, tener un buen ritmo y competir. Cada semana tenemos una carrera o dos, entonces tienes que ir con todo el trabajo hecho de la pretemporada. El trabajo había sido muy bueno, estábamos todos muy contentos porque sabíamos que el nivel lo teníamos, que el trabajo lo habiamos hecho bien y teníamos donde teníamos que estar. Hemos tenido un poco de mala suerte con las condiciones climatológicas, las carreras no eran propicias para los dorsales altos, había mucha marca, había que hacer mucho más camino que los primeros y era difícil estar cerca de esos tiempos, pero en cuanto ha llegado el frío se ha visto claramente el nivel que tenemos, tanto por mi parte como por la de Quim (Salarich), que hizo muy buenos resultados, se ha visto que somos muy competitivos y que cuando podemos salir pronto en las primeras mangas, el nivel está ahí. Dentro de nuestro equipo todos teníamos mucha tranquilidad con eso, incluido yo. Tenía mucha confianza con el equipo, el material, el staff, todo el trabajo… pero siempre viene muy bien poder confirmarlo, demostrarlo y sobre todo en una carrera como esta, delante de toda la plana mayor del esquí alpino. Así que elegimos una buena noche para hacer el resultado».
Juan del Campo destaca la tradición en esquí alpino de países como Austria, donde este deporte es considerado como deporte rey y las pistas de esquí se llenan como si fueran estadios de fútbol. Pasar a la segunda manga y terminar la prueba, fue algo casi indescriptible.
«Es una sensación muy intensa, muy buena, sobre todo por la euforia que genera hacer una buena manga , el poder explayarte. Yo tenía una espinita un poco clavada de esa carrera, de hace cuatro años, porque es una carrera con una nieve muy dura, es una pista de patinaje, pero tuve un focus muy bueno en ir a por todas, no quería dejarme nada en la pista, no quería tener remordimientos de esa manga. Fui con todo y me salió muy bien, me pude vaciar entero en la pista y ya solo por eso da una sensación de mucha euforia, pero si además 45.000 personas te están gritando, animando y aplaudiendo, te vienes muy arriba, que es lo que pasó. La sensación es increíble, sientes que todo el público está contigo. Dije: estaría bien hacer otra manga más para volver a sentir lo mismo. Fue una experiencia increíble, la verdad».
Del Campo ha logrado el mejor resultado de su carrera en un momento muy importante, al quedarle todavía varias Copas del Mundo por disputar y los Mundiales que se disputarán del 6 al 19 en Courchevel Meribel (Francia).
«Fue un buen momento para hacer un resultado así porque vienen los Mundiales, viene otra Copa del Mundo muy seguido, te confirma un poco lo que veníamos diciendo, un nivel de confianza alto en los entrenos que estaba teniendo, pero poder plasmarlo en carrera como que te reafirma un poco a ti. Encaramos muy bien lo que nos queda de temporada. Nos quedan tres carreras de Copa del Mundo, una de ellas los Mundiales, que siempre es una carrera particular porque hay más presión para los de arriba y los de atrás podemos salir literalmente a por ellos, a cazarlos. Hay buenas espectativas. Esperemos que las condiciones de frío, que las condiciones de la pista sean buenas para tener una manga equitativa para todos y que podamos volver a demostrar ese nivel» destaca Juan.
El deportista de Basque Team afirma que llega en su mejor momento a todas las citas mencionadas.
«Yo me veo más en forma que nunca, tengo plena confianza en el equipo que tengo, el material no va a fallar en ningún momento, todo depende de mí, mentalmente estoy mejor que nunca, el trabajo que he hecho a nivel psicológico durante año y medio me permite dejarme llevar y confiar en las capacidades que tengo, y hay poco que perder, mucho que ganar y sobre todo mucho que disfrutar en las carreras».
El pasado cuatro de enero, dos esquiadores alpinos vascos coincidieron por primera vez en la história en una Copa del Mundo. Juan Del Campo y Aingeru Garay compitieron en la Copa del Mundo de Garmisch-Partenkirchen. Juan destaca el buen momento que vive el esquí alpino vasco y en general todos los deportes de invierno, en un país que no cuenta con nieve y en el que los deportistas tienen que salir fuera para poder entrenar y crecer.
«El tema del País Vasco incluso a mí me sorprende. Si coges las estadísticas no solo Aingeru (Garay) o yo o Lucas (Eguibar). La mitad del equipo nacional es vasco, la mitad. Algo tenemos, algo tenemos con los deportes de invierno, no sé si es la actitud, no acabo de identificarlo pero la realidad es que los vascos y los deportes de invierno tenemos una buena simbiosis. Es simplemente explotarlo, aprovechar el momento en el que estamos en los deportes de invierno, seguir invirtiéndo en ese deporte vasco e intentar conectar a las nuevas generaciones con los qe ya estamos ahí arriba para transmitir todo ese aprendizaje que tenemos, ya que nos ha costado muchos años aprender y entender cmo funcionan bien los deportes y cómo ser buenos en ellos. No podemos perder esa inercia, hay que intentar transmitirlo a las próximas generaciones y así es como se crean los grandes equipos en estos deportes.