Iñigo Peña

Bio

Iñigo Peña empezó a practicar piragüismo con diez años. Fue su primer y único deporte; le gustaba y se le daba bien y prefirió no probar ningún otro. Desde el principio supo que sería su pasión y ahora mismo es su prioridad, a pesar de que también estudia Derecho. Aunque lleva concentrado en la Blume de Madrid desde los 16 años, Iñigo milita en el club Itxas-Gain Kirol Elkartea y es deportista de Basque Team desde 2009. Sus compañeros destacan su envergadura, su fortaleza, su experiencia en citas internacionales y su carácter, que le ayuda a tirar siempre hacia delante.

La progresión de Iñigo en el piragüismo en aguas tranquilas en los últimos tiempos está siendo impresionante, hasta ser uno de los referentes a nivel estatal en la actualidad. En 2017, explotó de manera brillante a pesar de que el inicio de la temporada no fue fácil para él, ya que la Federación Internacional decidió modificar las pruebas del programa olímpico y sustituir la prueba de K4-1.000 metros, en la que Iñigo competía y entrenaba desde hace 8 años, por la de 500 metros. Al tratarse de un año post-olímpico empezó la campaña tranquilo, entrenando más suave que otros años aunque con buenas sensaciones. Decidió preparar el selectivo nacional junto a Francisco Cubelos y se lo adjudicaron con más holgura de lo esperado. Después, en las Copas del Mundo de Szeged (Hungría) y Belgrado (Serbia) consiguieron sendos oros y además un récord mundial en la prueba húngara, en el K2-1.000m.

La pareja se acopló magníficamente a las nuevas circunstancias y siguió haciendo un maravilloso trabajo en el Europeo de Plovdiv (Bulgaria). Se adjudicaron el bronce en el K2-1.000 metros, y el oro junto a Marcus Cooper y Javier Cabañín en el K4-1.000 metros.

Tras el Europeo, también participaron en el Mundial de Racize (República Checa) en el que cosecharon un sexto puesto en el K2-1000.

En 2018 volvieron a demostrar que son una pareja muy fuerte. Iñigo confirmó su billete para el Europeo de Belgrado y para la Copa del Mundo de Szeged con una soltura abrumadora. En el embalse de Trasona se decidió qué K-2 se llevaba el billete para disputar esas dos pruebas y la dupla formada por Peña y Paco Cubelos fue la más rápida, con un tiempo de 3:21.006, tres segundos menos que la siguiente embarcación.

En la Copa del Mundo de Szeged 2018 disputada el 18 de mayo, volvieron a brillar, adjudicándose la medalla de plata en la prueba de K2-1.000 metros. Después, en el Europeo de Belgrado disputado en junio, ganaron el bronce en el K2-1.000, y redondearon el año en el Mundial, en agosto. Obtuvieron la plata en el K2-1.000, su primera medalla en una competición de estas características, además del bronce en el K4-1.000.

Sin embargo su hambre de victorias no acabó en 2018. Un año después Peña y Cubelos ganaron la medalla de plata en el Mundial de Szeged y de paso clasificaron su embarcación para los Juegos de Tokio 2020. Estos serán los segundos Juegos para el de Zumaia. Le faltó muy poco para clasificarse para los de Londres 2012 y en los de Río de Janeiro 2016 consiguió un diploma olímpico al terminar en quinta posición la prueba del K4-1.000.

Además de los logros conseguidos en los últimos tiempos, destacan su octavo puesto en la prueba de K4-1.000 en el Campeonato del Mundo de 2013, el noveno en el de 2014 y el sexto en 2015. Además fue cuarto en el campeonato de Europa de 2013 en esa misma prueba y tercero en 2015. Destacan también el oro cosechado en la Copa del Mundo de Milán en 2014 y la plata lograda en la Copa del Mundo de Montemor (Portugal) en 2015.